Miedos ...

No me da miedo tu presente,

temo por tu futuro.

No me da miedo tus sueños,

temo que no se cumplan.

No me da miedo tu soledad,

temo que no acabe.

No me dan miedo tus lágrimas, 

temo que no cesen.

He aprendido mucho aunque no parezca,

he aprendido a callar,

a decir lo que pienso cuando se debe,

a defenderme

y a llorar cuando el alma no tregua.

Pero sobre todo he aprendido a renunciar,

a dejar atrás aquello que no me deja crecer,

aquello que me hace infeliz

aquello que no necesito en mi vida.

A veces ese aquello es un trago inadecuado,

a veces una situación insoportable,

a veces un alma descarriada,

y solo de vez en cuando, 

ese aquello eres tu.